Adaptabilidad a los movimiento y a las formas del cuerpo, proporcionando un gran confort.
Las camas articuladas ya no solo predominan en entornos hospitalarios o para personas con movilidad reducida. El uso de estas camas está cada vez más extendido, por sus grandes beneficios.

¿Por qué el uso de las camas articuladas es mucho mayor en los últimos años?
La respuesta es sencilla: los usuarios quieren dar un paso adelante en su tiempo de descanso. Ya no sólo se utiliza la cama para dormir: cada vez más personas trabajan en su habitación, ven la televisión, leen antes de dormir, juegan a videojuegos… Y en este sentido, las camas articuladas ofrecen una mayor comodidad. Varios son sus beneficios…
- Máximo confort:
El cambio de postura o el irse a dormir después de leer, por ejemplo, ya no será un suplicio: bastará con pulsar un botón. De esta manera, lograrás sacarle el mayor partido al tiempo que pases en tu cama. - Mejoras en el sistema circulatorio:
La elevación de las piernas permite el retorno venoso y la distribución uniforme del peso del cuerpo, por lo que este tipo de camas son muy beneficiosos para personas con problemas de circulación. - Mayor calidad del descanso:
Las numerosas funciones de las camas articuladas y la adaptación total a las necesidades del usuario logran un incremento muy notable en la calidad del descanso. - Reduce los problemas respiratorios:
La posibilidad de adoptar una posición ligeramente elevada del tronco favorece la apertura de las vías respiratorias. De esta manera, evitas ronquidos y otros problemas que no permiten un descanso total. - Alivio de problemas digestivos:
La posición elevada del tronco también logrará reducir un problema muy común como el reflujo. - Apnea:
La inclinación del respaldo de la cama te permitirá aliviar este problema.
